Hoy día de Andalucía, mientras tod@s celebramos y pasamos un día en familia, un pulmón de nuestro pueblo está siendo ejecutado.
Ante la desidia de nuestro Ayuntamiento, que se ha lavado las manos, los 478 pinos mal llamados enfermos, se han convertido en una auténtica masacre.
Parece que los pinos más sanos están siendo cortados, dejando los de porte más débil que por ahora no sirven a quienes están preparando los troncos ordenadamente para sacar provecho en detrimento de toda la comarca. El hábitat de aves protegidas está siendo destruido y nos están privando de todos los beneficios que esta masa arbórea genera.
En un momento en el que es fundamental proteger nuestros árboles y plantar en lugar de talar, nuestro ayuntamiento mira para otro lado y no ejerce su función de protector del medio ambiente.
Vergüenza es poco…